Una televisión para comérsela

Ver la mesa tan llena de manjares en estos días (quizá con menos lujos que otros años, pero abundantes para lo habitual) me ha obsesionado hasta tal punto que no puedo dejar de pensar en comida. Y echando un vistazo a la televisión, esta sensación de que el estómago es una parte importante en nuestras vidas se acrecienta.

La televisión en grandes dosis puede ser indigesta.

Programas de cocina de los de de toda la vida, los va a haber siempre. Sergio en TVE, Arguiñano donde se le necesité. También puede darse una vuelta de tuerca a los programas de cocina, que no se estancan y evolucionan a tratamientos diferentes como el recién llegado Cocineros sin estrella de Telecinco. Además de funcionar bien en la franja pre-hora de comer, estos programas son útiles con sus repeticiones para relleno de canales femeninos de TDT (nótese el gusto que me ha dado utilizar la palabra relleno en este contexto). Pero de todos los programas de cocina que pueden existir, me quedo con uno menos corriente de lo habitual, (y eso que Arguiñano en sí, ya se sale de lo normal). Uno de mis favoritos es el del vasco Robin Food, que incluye una sección cuando llega el fin de semana llamada Guarrindongadas, en el que los espectadores le proponen probar recetas asquerososuculentas.

Por supuesto el factual no podía dejar esta temática sin tratar. Desde Pesadilla en la cocina, (sea versión Gordon Ramsay o Alberto Chicote), pasando por Crónicas carnivoras en Energy (por qué no va a tener la comida basura su espacio), a otros de corte más postrero: Dulces e increíbles, El as de las tartas, o el nuevo de Divinity, Charly's Cake Angels, que harán salivar a los más golosones. Además la moda sigue en alza. TVE anunció que realizará una adaptación del programa Masterchef, en el que se buscará al mejor chef de nuestras fronteras en un competitivo ambiente. 

Verás el sartenazo que te vas a llevar como no limpies la cocina.

Pero para programas divinos está el programa de cocina Bendito Paladar (Canal Cocina y 13TV), cuyas presentadoras no tienen desperdicio. Sor Beatriz y Sor Liliana, son dos monjas de clausura que conducen este espacio de recetas... casi celestiales.  ME LAS COMO.

Por último, si os parece que no se hace suficiente justicia a la comida en televisión, siempre nos quedará Canal Cocina, donde grandes como Jamie Oliver o Lorraine Pascale harán las delicias de los más exigentes, tanto en sus gustos gastronómicos como en los televisivos. Desde su logo de huevo frito a sus más variado programas, todo un homenaje al buen paladar.